El inicio, por parte de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, del expediente para la declaración de las botargas como Bien de Interés Cultural supondrá, sin duda, una mayor valoración social de este aspecto ancestral, tan arraigado en la tradición de la provincia de Guadalajara.
El día del Corpus puede considerarse como uno de los más solemnes y grandiosos de cuantos festejos se celebran en Castilla-La Mancha, casi no hay un pueblo o aldea que no se sume a esta festividad. En muchos lugares de nuestra comunidad autónoma es una fiesta de especial relevancia. El Corpus es la fiesta barroca más representativa de nuestra región. Forma parte de la cultura popular y su arraigo entre nosotros ha ido afirmándose con el paso del tiempo.
En el ámbito de la cultura, la Navidad cuenta con una larga tradición que se refleja en diferentes manifestaciones como las artes visuales, las artes escénicas, la música, la literatura o la gastronomía, pero también es un tiempo de tradiciones y costumbres culturales.
Su origen se remonta a mediados del siglo XIV, cuando la peste negra, que tantos estragos causó en Europa y en España, llegó a Puertollano, reduciendo su población drásticamente, de manera que sólo sobrevivieron trece familias, de lo cual dan cuenta las crónicas, que recogen literalmente, “… quienes atribulados y afligidos ofrecieron voto principal, celebrando el desposorio de María Santísima con el aventurado San José, cuyo voto se cumple todos los años el día de la octava de la Ascensión del señor a los cielos...".
Los Gancheros del Alto Tajo era un arriesgado oficio, ya extinguido, que consistía en transportar la madera extraída en zonas del curso alto del Tajo, dirigiendo los troncos sueltos de los pinos talados a través de río, hasta llegar a Aranjuez. La tradición festiva que recrea este antiguo oficio, la Fiesta de los Gancheros, se celebra el último fin de semana de agosto.
Hablar de la Semana Santa y gastronomía no es hablar de ayuno y abstinencia, aunque estas sean las palabras que fijan en la tradición el qué comer al menos en algunos de estos días. Y no es la práctica del ayuno y la abstinencia algo que se inventara el cristianismo; los judíos, los chinos, los egipcios, los asirios, los fenicios, los griegos o los romanos observaron estas prácticas con ligeras diferencias y lo hacían por muy variados motivos siempre con alguna mirada instintiva a lo sobrenatural.
El Traje típico manchego es una interpretación del que se usó en los siglos XVIII y XIX a partir de la vestimenta tradicional de la zona en la región o territorio de La Mancha (España).En cada provincia de Castilla- La Mancha hallamos una variedad distinta de la vestimenta típica