CASTILLO DE DOÑA BERENGUELA

El castillo de Doña Berenguela se localiza en Bolaños de Calatrava, (Ciudad Real), en la Plaza de Altozano, entre las calles del Castillo y Escuderos, en la zona noroeste del casco urbano. Este municipio a su vez se encuentra situado en el centro de la citada provincia, en el curso medio-alto del río Guadiana, en la comarca denominada Campo de Calatrava formando parte de la Submeseta Sur de la Península Ibérica.
 
Haciendo historia de la fortaleza, ésta fue construida por los musulmanes en el siglo XII, ubicándose en un buen emplazamiento dentro de la red de comunicaciones que conectaban el levante con el poniente peninsular y Córdoba con Toledo.

Tras la victoria cristiana en la Batalla de las Navas de Tolosa (1212) la comarca del Campo de Calatrava deja de ser la frontera entre cristianos y musulmanes y comienza a ser repoblada. El Castillo pasó a manos del rey Alfonso VIII que lo regala a su hija Doña Berenguela de Castilla en honor a su boda.

En el año 1229 Doña Berenguela donó el castillo a la Orden Militar de Calatrava, donación que sería confirmada por su hijo el rey Fernando III el Santo y por su nieto Alfonso X el Sabio. Se convierte entonces en sede de la Encomienda de Bolaños en el 1537, adaptando su estructura para mantener funciones administrativas hasta el año 1825 que abandonan la fortaleza.

Durante la desamortización de Madoz, el castillo sería subastado en el año 1864, pasando así a manos privadas hasta que a mediados del siglo XX la Diputación Provincial de Ciudad Real pasó a ser la nueva propietaria y acometió diferentes obras de rehabilitación en murallas y torres. Actualmente el Castillo de Doña Berenguela es de propiedad municipal.

La fisionomía de esta construcción obedece a una fortificación árabe de planta cuadrangular, que tuvo cuatro torres en sus orígenes, una en cada esquina, que reforzaban y defendían la muralla perimetral coronada con adarves almenados y rodeada de un foso excavado en la roca.  Constituye un típico ejemplo de castillo de llanura. En el interior del patio prácticamente han desaparecido todas las construcciones que se cimentaban en la roca natural, conservándose sólo aquellas que fueron excavadas en ella. Básicamente, está construido con mampostería, utilizándose el ladrillo en los vanos y las bóvedas.

En su origen las murallas se levantaron de tapial de tierra sobre zócalo de piedra y fueron paulatinamente forrándose de piedra. Los restos constructivos documentados pertenecen a diferentes épocas históricas, siendo los restos más antiguos los que se remontan a la época árabe. A esta fase se adscriben los restos de los baños, los canales de desagüe, el aljibe con su pozo, la alberca y el sistema de piletas para recogida y distribución de agua. Así mismo, son árabes la Torre Prieta, la Torre Alta de origen almohade, las murallas y el foso excavado en la roca rodeando todo el perímetro de la fortaleza.