Pasar al contenido principal

Laboratorio de los Ingleses

El Laboratorio de los Ingleses está ligado a la historia de la Real Fábrica de Paños de Guadalajara, que fue la más importante industria de la provincia durante el siglo XVIII. Esta última se instaló en 1719 por iniciativa de la Corona y buscaba implantar en el país la fabricación de paños finos, reducir la importación de telas extranjeras e incluso exportar a la América española. Supuso un gran avance en la recuperación económica de la ciudad de Guadalajara. Cuando se cierran sus talleres en 1822, los inmuebles que formaban parte del compejo pasarán a tener diversos usos, principalmente castrenses.

El conocido como Laboratorio de los Ingleses se edificó en 1786-87 con criterios funcionales de los que resultó un edificio muy sencillo, sin recursos ornamentales gratuitos, totalmente orientado a su uso fabril.

La redacción del proyecto fue realizada por Fray Eugenio Valcázar, Diego García y Feliciano de la Isequilla y fue concebido con la finalidad de acoger a cierto número de trabajadores especializados que, a través de un agente irlandés, se contrataban en Inglaterra para la creación de nuevos paños. Sin embargo, el edificio se quedó pequeño para las necesidades de producción, y hubo de transformarse en Oficina de Tintes.

Tras el cierre de la Fábrica de Paños de Guadalajara el Laboratorio de los Ingleses pasará por distintos usos, el último de los cuales ha sido un taller de carpintería, hasta su reciente abandono.

El edificio tiene de planta rectangular y está orientado en un eje norte-sur paralelo a la carretera de Fontanar. Cuenta con tres alturas; planta baja, primera y bajo cubierta. Está construido con muros de carga perimetrales de fábrica de ladrillo revocado con estuco de cal, y otro interior longitudinal que parece ser de entramado de madera. Este último, en planta baja se ha sustituido por una estructura de vigas metálicas roblonadas. Se cierra con una cubierta a cuatro aguas de teja árabe.

La fachada, carente de adornos, se reduce a una seriación de ventanas que aportan generosa iluminación al interior, tan adecuada para un edificio de carácter fabril.

Gracias a un antiguo plano fechado el 24/3/1788 podemos saber la distribución interior del inmueble y la dedicación de las diferentes salas. La planta baja estaba muy compartimentada en varias habitaciones comunicadas entre sí sin pasillos. Bajo la puerta lateral derecha penetraba el caz que alimentaba tres calderas situadas en sendas oficinas para tintes. Junto a la oficina del fondo había un cuarto cuadrado para los maestros tintoreros, le seguía una escalera que sólo comunicaba con el cuarto principal de la planta superior, dos almacenes de géneros y útiles para los tintes y cuatro oficinas para custodiar las lanas que llegaban desde los lavaderos.

En el lateral izquierdo se abría una entrada que conectaba con la escalera de subida al cuarto principal y al desván.

Todas estas habitaciones desaparecieron durante la reforma que adaptó el lugar para serrería. La primera planta tiene menos estancias y más amplias, dedicadas en su conjunto a tendederos de lanas blancas y tinturadas y a paños preparados para tintadas. Por último, en el desván se sitúan dos espacios destinados a tendederos de paños después de deslavazados.

Información
  • Provincia y localidad
    • GUADALAJARA
    • GUADALAJARA (capital)
  • Categoría
    CONSTRUCCIÓN DE INTERÉS PATRIMONIAL
  • Fecha DOCM
    06/07/2016
  • Figura de protección
    Bien de Interés Patrimonial (BIP)
  • Adscripción cultural
    Edad Moderna
  • Tipo
    BIEN INMUEBLE
  • Periodo
    S. XVIII
DOCUMENTOS PARA DESCARGAR
DOCM DECLARACIÓN
GALERÍA DE IMÁGENES

Laboratorio de los Ingleses

Laboratorio de los Ingleses