El Archivo Histórico Provincial conserva unos pliegos de cromos con 72 imágenes de pequeño tamaño (3,5x 4.5 mm) sobre la Feria. La autoría corresponde a los fotógrafos Belda, pero la impresión por medio del huecograbado corrió por cuenta de la prestigiosa casa Fournier-Vitoria, conocida por su especialidad en la fabricación de naipes. Este pliego es la colección más completa que se conserva, es, por tanto, un documento único.
Desconocemos si este documento gráfico formó parte de un proyecto de álbum sobre la feria. En cualquier caso, el interés es doble ya que, por un lado, apenas hay media docena de fotografías del interior de la feria anteriores al año 1944, y, segundo, porque son testimonio del paso de la Feria de antaño -pintoresca y costumbrista- a la Feria de Muestras, moderna (para la época) y lúdica.
¿Cómo se llevó a cabo este proceso?
Aquel año se llevó a cabo la gran ampliación del recinto ferial, pasando de 11.000 a 28.000 m². Del antiguo edificio, conocido como «la sartén» -quizá por la vista aérea que proporcionaba el grabado de La Musa de 1866- solo permaneció el templete central y la puerta de hierro.
El resto fue modificado. Esta reforma tenía como objetivo impulsar y renovar la feria que, como en muchas ciudades de España, amenazaba con reducirse a un programa de festejos. Dos motivos influían en la decadencia del comercio ferial, uno la propia situación de pobreza tras la guerra civil: no había dinero en los bolsillos de los albacetenses, y, por otra parte, el comercio local con su surtido era capaz de proveer a la población. No había que esperar a la feria para abastecerse como antaño.
Las ferias de Muestras, que habían nacido en los años 30 del siglo pasado, adelantaban novedades en la incipiente mecanización del campo, especialización agraria, mejora en razas ganaderas, al tiempo que promocionaban artesanía e industria local (cuchillería), comarcal, provincial…Con esta idea, que necesitaba una elevada inversión en aquellos momentos tan duros de la postguerra, se llevó a cabo la obra bajo la dirección de los arquitectos Julio Carrilero Prat y Miguel Ortiz Iribas.
Tras la reforma, todo, absolutamente todo, fue retratado por los fotógrafos Jaime Belda (padre e hijo), como vemos en este pliego de pequeñas imágenes. Son un reportaje excepcional porque inmortalizaron el nuevo ferial de Albacete, y además sirvieron para ilustrar las revistas de Feria de tres décadas. Precisamente son estas revistas las que nos han permitido datar las fotografías.
Las instantáneas las hemos agrupado por materias. Muchas imágenes nos proporcionan vistas en perspectiva del nuevo aspecto del paseo central con sus pabellones exentos tras la puerta principal de acceso, que representan un nuevo concepto de Feria.
Frente a la tradicional “Cuerda” en los ejidos con sus tratos de ganado caballar, mular y asnal, los pabellones recrean una moderna Feria de Muestras, incluyendo espacios para exposición de ganado, artesanía local y productos agrarios, además de uso comercial, institucional, clubes, peñas… Por ello, las fotografías más numerosas se refieren a ambas funciones, el pintoresco y tradicional del trato ganadero en La Cuerda, y el moderno en pabellones con muestras, maquinaria y exposiciones comerciales. El valor de las transacciones de ganado era uno de los motores de la feria. En el año 1900 ascendió a dos millones de reales. En 1948, a nueve millones de pesetas y en 1951, diez millones de pesetas. La feria de ganados se siguió celebrando hasta el año 1973 en que desapareció, ya desbancada por la mecanización del campo.
¿Cómo se promociona Albacete, en aquel año de 1944?
Albacete exportaba su imagen más amable. La ciudad se reconstruía y mejoraba. Algunas de las obras fueron sufragadas por la Dirección General de Regiones Devastadas como la iglesia de San Juan, por lo que trabajaron en ella presos políticos. Otras construcciones que vemos en las fotografías son la de ampliación de la Audiencia, a la que se le sumó una segunda planta, el depósito del agua de la Fiesta del Árbol, la remodelación del Altozano y la colocación de la fuente (todas realizadas en 1944, al igual que el barrio de la Estrella) … Culturalmente se recuperaron los Juegos Florales en el mismo año. El aspecto de los paseos y calles principales, tomados en feria por la cabalgata inaugural protagonizaron el NODO de 1948.
El reportaje es interesante porque nos ilustra sobre la vida de Albacete no sólo contemplamos el edificio ferial, sino las costumbres y tradiciones de sus vecinos, pasando por los toros, el fervor a la Virgen de los Llanos, La Cuerda y su tradicional feria de ganados, la feria de muestras de septiembre y de mayo con las exposiciones de bienes de consumo que organizaba el Sindicato Vertical… Todo un mundo para observar la evolución de la feria tan tradicional y tan cambiante.
FOTOS ANTERIORES A LA REFORMA
Autora
Elvira Valero de la Rosa
Directora del Archivo Histórico Provincial de Albacete
Te animamos a ver este interesante vídeo donde podrás conocerlo con mayor detalle.
Anónimo el Jue, 07/09/2023 - 12:37
Muy bonito
Pedrojosejaen el Lun, 11/09/2023 - 15:19
Muy buen texto y muy entrañable