El circo siempre conquistó el corazón de las personas. Hace miles de años comenzaron su andadura los artistas circenses y la historia del circo. Hoy se sigue reinventando. Circo es Cultura.

Cada tercer sábado de abril, desde el año 2008, se celebra el Día Mundial del Circo. Es una efeméride promovida por la Federation Mondiale du Cirque, Federación Mundial de Circo, que busca reconocer, preservar y promover el valor del circo y su aportación cultural, a la que se suman un gran número de compañías, asociaciones y colectivos a nivel mundial.

El circo se le ha conocido como el mayor espectáculo del mundo porque dentro de él caben diferentes actividades, diferentes disciplinas, diferentes formatos, pero lo más importante es que lo pueden disfrutar todas las personas sean de la edad que sean, sean de la procedencia cultural que sean, sean del lugar del mundo que sean. El circo se encuentra en todas las culturas del mundo.

Pero si el circo es el mayor espectáculo, también podemos decir que es uno de los espectáculos más antiguos del mundo.

Quizás los primeros “ejercicios circenses” se hiciesen junto a un fuego en la reunión de una familia o tribu al caer la noche, cuando una de las personas presentes demostrase ante las demás una habilidad que poseía y que supuso la sorpresa primero y la admiración después de todos.

Imaginemos que un joven se levanta, llama la atención, cuando es capaz de mantener en equilibrio sobre su frente una larga estaca mientras gira alrededor del fuego y consigue que ésta se mantenga sin caer. Todo el mundo reacciona a la sorpresa, pero todavía quedan más perplejos cuando otra joven también toma el protagonismo y lanza al aire y juega con cuatro huevos de ave, que recogió de un nido esa mañana y que consigue que una vez tras otras vuelen y caigan en sus manos sin romperse. El y ella han dado lugar al primer ejercicio de circo, se han convertido en el primer equilibrista y en la primera malabarista.

Al día siguiente, la tribu les pide que repitan lo que hicieron la noche anterior pero esta vez se les han sumado otras personas que golpean el tronco hueco que utilizan para hacer la percusión y otra persona sopla la concha marina que produce silbidos. Al malabarismo y al equilibrio le han unido la música. Se ha creado el espectáculo de circo.  

Esto es solo una pequeña suposición que me gusta pensar que así fue y que en muchas celebraciones familiares ha seguido siendo en los más diferentes lugares del mundo. ¿Quién no recuerda saltar a la comba, hacer rodar un zompo en la mano, utilizar el palo de una escoba para hacer equilibrios, subirse a dos botes sujetos por una cuerda para hacer de zancos y a tantos otros juegos circenses?

¿Por qué he supuesto que era una joven o una niña la que hizo malabarismos? pues porque en una tumba de Beni Hassan, en Egipto, que se calcula que es del año 2040 antes de Cristo, es decir hace 4.000 años, se descubrió un mural en el que una niña hacia juegos malabares con cuatro pelotas, hasta en unos de los dibujos se ve que los está haciendo con los brazos cruzados, es decir “más difícil todavía”

Según diversos investigadores e historiadores hay pruebas arqueológicas de que las acrobacias se hacían hace 3.000 años en lugares como Mesopotamia y que en China y la India también había equilibristas, malabaristas y contorsionistas.

Pero pruebas hay en diferentes lugares de la tierra y en diferentes épocas de la historia desde oriente lejano a oriente próximo, desde África a América, desde Europa hasta Australia.

El circo, las pruebas o ejercicios de circo, se han unido a celebraciones festivas, a celebraciones y ritos religiosos, a celebraciones sociales. El circo ha estado presente en todas las culturas y en diferentes momentos de la vida de los distintos pueblos o sociedades.

En Europa tras unos tiempos de decadencia vuelve a resurgir en la Edad Media cuando compañías o troupes (grupo de artistas, especialmente de teatro, danza, cine o circo que trabajan juntos, desplazándose de un lugar a otro) recorrían los pueblos y villas llevando su música y espectáculos entre los que se encontraban números de circo. Posteriormente se extiende la definición de “Saltimbanqui” (persona que realiza saltos y ejercicios acrobáticos, generalmente en espectáculos al aire libre).

Hay que dar un salto en el tiempo para llegar a ver el nacimiento de lo que entendemos hoy como circo. Este hecho se produjo en 1768 cuando un inglés, sargento de la caballería, Philip Astley, montó un espectáculo donde él hacía equilibrios y cabriolas sobre caballos. Dos años después construyó un circo al aire libre con unas gradas de madera y una pista redonda de 13 metros de diámetro, distancia mínima a la que un caballo puede correr a galope, esta medida todavía se conserva en todos los circos del mundo. Como siguió conquistando éxitos decidió cubrir ese espacio colocándole techo y dando más comodidad al público.

Tanto gustaba su espectáculo que lo fue haciendo crecer, incorporando otros números como malabaristas, equilibristas y funámbulos (acróbata que realiza ejercicios sobre la cuerda floja o el alambre) y también incorporó a unos personajes que ya no se entiende el circo sin ellos, los payasos con lo que se aumentaron los momentos divertidos llenos de humor que hacían las delicias del público.

El circo se fue expandiendo por todo occidente como Estados Unidos, Alemania, Rusia, Francia, España…

En España comenzaron sus representaciones diferentes compañías de circo, que procedían de otros países europeos. El primer circo que se instaló en Madrid fue en 1.830 y tras cuatro años dejó la carpa y se asentó en un edificio bajo el nombre de “Circo Olímpico”, que años más tarde fue cambiado de nombre pasando a llamarse Teatro del Circo que fue destruido por un incendio. En ese mismo lugar, Plaza del Rey, surgió en 1880 el Circo Price, que también fue demolido, perdiéndose para siempre ya que el actual Circo Price es una construcción moderna y cerca de la estación de Atocha.

En 1887 se inaugura el Teatro Circo de Albacete que hoy, después de su restauración en 2002, se mantiene en activo como teatro y como circo lo que le convierte en un lugar extraordinario y excepcional. A finales del siglo XIX y principios del XX había cientos de Teatros Circos en Europa que fueron despareciendo o convirtiéndose en teatros o circos. Muchos ejemplos tenemos en la actualidad que, aun conservando su nombre, no conservan la doble funcionalidad. Las carpas con compañías ambulantes, itinerantes con gira nacionales e internacionales, habían desarrollado su máxima actividad y llevaban al cierre o transformación de esos teatros circos.

El Teatro Circo de Albacete tiene la doble funcionalidad manteniendo el escenario de teatro y la pista de circo, donde se celebra cada mes de febrero el Festival Internacional de Circo de gran importancia a nivel internacional con participación de grandes artistas y compañías procedentes de todos los continentes que compiten ante un jurado internacional de prestigio para conquistar o ganar el Cirquijote de oro, de plata o de bronce. Premio que tiene el nombre de nuestro personaje más universal, Don Quijote de la Mancha.

Los espectáculos de circo comenzaron desde la reinauguración del Teatro Circo en 2002 y ante el interés creciente del público se creó un festival de circo en 2004 con la participación de compañías españolas. En 2008 y gracias al convenio entre Cultural Albacete, entidad organizadora del Festival, con el Ministerio de Cultura y la Consejería de Cultura de Castilla- La Mancha permitió dar un impulso al festival pasando a ser Festival Internacional de Circo de Albacete. 

En estos 14 años, ediciones, han participado cientos de artistas procedentes de todos los continentes, hemos disfrutado de los mejores equilibristas, trapecistas, contorsionistas, malabaristas, fonambulistas, y muchas especialidades más y sin faltar los payasos y payasas de prestigio.

Para juzgar y premiar, los jurados internacionales han sido compuestos por grandísimas personalidades del mundo del circo que han dado mucho prestigio a los premios y en consecuencia a los artistas que los obtienen.

En las últimas ediciones del Festival se han incorporado otras actividades relacionadas con el circo como cine, exposiciones, talleres… pero a destacar una gala de circo destinada solo a las personas jóvenes, es decir, solo pueden asistir las que tienen entre 16 y 25 años y dónde, aparte de ver artistas premiados en el Festival, el público puede hablar y relacionarse con los artistas al finalizar el espectáculo.

Miles de espectadores asisten a todas estas actividades procediendo de diferentes lugares de España y de otros países. Más de un 50 % de las entradas se adquieren fuera de la ciudad de Albacete.

En los últimos años, el Festival crece en actividades, en la última edición hubo un espectáculo realizado en exclusiva por artistas de un país invitado, en ese caso China, y también, con ello, crece el público. 

El Festival Internacional de Circo de Albacete es uno de los festivales de mayor prestigio del mundo, también es el único que se celebra en un Teatro Circo lo que le da una especial singularidad.

Hoy el Teatro Circo de Albacete es el único que queda en España, no de nombre, con espectáculos de teatros y con espectáculos de circo es su pista. Y también es el más antiguo del mundo de los pocos existentes pues tiene unos meses más de antigüedad que el de Ámsterdam, Holanda, que es el segundo más antiguo. 

Según la información obtenida de la página web “infocirco.com” en Castilla la Mancha hubo otro teatro circo en Ciudad Real. Conocido como Teatro-Circo o Teatro de Verano, ocupaba un extenso solar en la calle de Alarcos. Desde su fundación a finales del s. XIX, hasta el mes de marzo de 1901, se hallaba cubierto solamente por una marquesina. En dicho año se realizaron importantes reformas, cubriéndolo completamente. Más tarde pasó a denominarse Teatro Cervantes, una vez desaparecido su homónimo de la calle de Toledo.

En la actualidad los circos itinerantes que usan sus carpas están en decadencia en España pues ya no encuentran los lugares más apropiados para instalarse en las diferentes poblaciones, especialmente las grandes ciudades y capitales donde los espacios disponibles están a las afueras y con difíciles condiciones de instalación y de accesos para el público. Ello ha llevado a una nueva creación de espectáculos de circo llamado contemporáneo adaptado a escenarios de teatros o a pequeños formatos al aire libre que quepan en una plaza.

El circo cada día se reinventa, el circo sigue y seguirá vivo, vuelve a realizarse en diferentes espacios, pero sigue despertando la sorpresa y la admiración del público. Sigue siendo el espectáculo para todas las personas de todas las edades.

Hoy el circo espera recuperar el lugar que tuvo en el aprecio de las gentes y el lugar de prestigio que a finales del siglo XIX y principios del XX compartía con la Ópera y la Danza. Era noticia de todos los periódicos, sus artistas eran reconocidos como personalidades y asistir a los espectáculos de circo eran importantes como prestigio social y cultural.

El circo que siempre conquistó el corazón de los niños y niñas vuelve a conquistar el corazón de las personas adultas como lo conquistó desde hace miles de años cuando comenzaron su andadura los artistas circenses.

Texto y Fotografías: Ricardo Beléndez Gil. Director Gerente de Cultural Albacete. Director del Teatro Circo de Albacete..Director Gerente del Festival Internacional de Circo de Albacete.