Escritura de constitución de la sociedad “La Aventurada” para la explotación de cuatro minas de plomo en Villamayor de Calatrava. Documento del mes de agosto de 2025 en el Archivo Histórico Provincial de Ciudad Real.
Escritura de constitución de la sociedad “La Aventurada” para la explotación de cuatro minas de plomo en Villamayor de Calatrava. 1893, mayo, 20. Almodóvar del Campo (Ciudad Real)
Para el documento de este mes nos dirigimos, de nuevo, al fondo de Protocolos Notariales que, como hemos comentado en más ocasiones, constituye una fuente muy rica de temas de investigación.
El tema elegido en esta ocasión está de bastante actualidad en la provincia de Ciudad Real y nos recuerda a tiempos pasados. Se trata de la explotación minera del subsuelo de esta provincia. Como muchos hemos podido leer en la prensa y ver en las noticias existe un proyecto de explotación de una mina subterránea de wolframio en el término de Abenójar.
Al hilo de estas noticias presentamos un documento que nos recuerda la explotación minera que se desarrolló en España, en nuestro caso en Ciudad Real, desde mediados del siglo XIX, y que fue impulsada por el decreto-ley de 29 de diciembre de 1868, que establecía una nueva legislación minera.
Se trata de una escritura de 1893, firmada en Almodóvar del Campo, ante el notario José Valor Amorós. Esta escritura recoge la Constitución de la sociedad “La Aventurada” para la explotación de cuatro minas de plomo. Los miembros de esta sociedad son, por un lado, Joaquín Maján, José Antonio Corbín y Antonio Pacheco y, de la otra parte, la Compañía Minero y Metalúrgica del Horcajo, con sede en París y Madrid, cuyos ingenieros residían en el propio pueblo de Minas del Horcajo, pedanía de Almodóvar del Campo.
Estas minas estaban situadas en el término de Villamayor de Calatrava y en el texto se dan detalles de su situación exacta. Las minas fueron adquiridas por los tres primeros, pero al no disponer de los medios ni recursos para su explotación, acordaron con la compañía minera establecer esta sociedad.
Este tipo de escritura no es aislado dentro del fondo de protocolos, al contrario, podemos encontrar múltiples ejemplos: compras de terrenos por parte de compañías mineras, la mayoría de capital extranjero, entre ellas la Sociedad Minero Metalúrgica de Peñarroya; constituciones de servidumbres de los terrenos donde se encuentran las minas; actas comunicando inundaciones de minas; contratación de suministro y materiales tanto para la explotación de las minas como para hospitales mineros. Algunas de estas escrituras vienen acompañadas con planos de situación que permiten conocer la zona. Como vemos, información más que suficiente para completar un estudio sobre el pasado minero de la provincia de Ciudad Real.