Torreón de Carrión de Calatrava

El edificio llamado el Torreón de Carrión de Calatrava comprende en realidad varias construcciones de las cuales dos son independientes, reunidas en torno un patio interior y un corredor con salida a la calle Cervantes. Datan de finales del siglo XVIII y fueron edificadas para servir de casa solariega de los Condes de Carrión. En el siglo XIX pasó su propiedad a la familia Zaldívar.

El edificio principal, cuya fachada da a la calle Caídos, es de planta rectangular, mide 14.50 mts. de largo x 9.50 mts. de ancho, posee tres alturas y está construido con muros de carga. Los forjados están formados por vigas de madera y la cubierta se cubre a cuatro aguas a base de cerchas y teja curva cerámica sobre cañizo.

Las fachadas anterior y posterior de este edificio principal tienen la misma composición. Poseen cuatro vanos abiertos por planta en cada una de sus fachadas, todos ellos enfrentados, adintelados los de las dos primeras plantas y cerrados con arcos de medio punto los del último piso; la fábrica utilizada es el típico aparejo de ladrillo toledano y mampuesto cajeado; una fina imposta de ladrillo recorre el edificio entre el 2º y 3er. piso, terminando con unos muros coronados por una cornisa también realizada en ladrillo.

El interior de este edificio está formado por tres pisos con espacios diáfanos a excepción de la planta baja, que sirvió antaño de vivienda. La comunicación entre plantas no es uniforme con escaleras independientes situadas en distintos puntos del inmueble.

El segundo edificio cierra el patio interior por el lado de poniente y se sitúa perpendicular al edificio principal. Tiene planta rectangular con un saliente y mide 27 mts. de algo x 8 mts. de ancho y se cubre a dos aguas. Posee un alzado compuesto de tres plantas:

La primera planta – semisótano – se compone de dos crujías cubiertas con bóvedas de crucero, construidas con ladrillo de adobe y enfoscadas con argamasa de cal y arena. Estaba compartimentada mediante muros de tapial de unos 60 ctms. de grosor hasta el arranque de los arcos y muro de adobe a continuación. El exterior de su fachada está compuesto de mampuesto concertado, jalonado de contrafuertes laterales. Pudo utilizarse como bodega.

La segunda planta es de características similares a la anterior en muros y bóvedas. Sería almacén para lanas y otros productos agrícolas.

La planta superior era un espacio diáfano dedicado a granero. Era conocido como «el camarón». Para la realización de su tejado se utilizaron vigas de madera apoyadas sobre muros de carga sobre el que descansaba una tablazón compuesto de tablas, cañizo, barro y teja curva.

Estos edificios han sido utilizados para diversos usos. Últimamente han sido restaurados en distintas fases, destinándose a partir del 2013 a ser un Centro Cultural, denominado El Torreón.