Iglesia del Salvador de Talavera de la Reina

Las primeras referencias documentales de la iglesia del Salvador de Talavera de la Reina se remontan a los años 1145 y 1205. Supuestamente fue fundada por los nobles talaveranos, motivo por el cual se le dio el nombre de El Salvador de los Caballeros. En 1487 Juan de Arévalo fundó una capilla de las Nieves. El artesonado se construyó en 1570 gracias a la donación que hizo desde América Miguel Ruiz de Herrera. Se trasladó a su interior desde la iglesia de San Ginés el sepulcro de García de Loaysa, arzobispo de Sevilla y confesor de Carlos V. El chapitel de la torre fue realizado por Vicente Beltrán en 1783. En 1842 se le anexionó la parroquia de San Andrés, y luego junto con la de San Miguel se afiliaron todas a la Colegial hasta el año 1898.

La iglesia del Salvador es de estilo gótico-mudéjar donde se puede apreciar en el exterior un ábside mudéjar toledano realizado en ladrillo, en el cual se forman arcos entrelazados en el segundo y tercer cuerpo, y se ondulan en arcos lobulados. El zócalo del ábside está realizado en mampostería encintada.

La torre, de cuatro cuerpos separados por impostas, fue rematada en el siglo XVIII, aunque los primeros cuerpos son anteriores de estilo renacentista.

También llaman la atención las rejas existentes cerrando los dos accesos al templo.

El interior se cubre con bóveda de arista y la techumbre está formada por dos cuerpos, el primero compuesto por un artesonado de maderas tejidas y anudadas, construido hacia 1570, y el segundo posee un juego de cornisas y arcos de medio punto y con blanco de yeso.

Durante el siglo XVIII fue instalado el retablo que presidía la iglesia hasta que sustituyó por el que permaneció hasta sus últimos días, en 1761. Hoy en día se encuentra en la parroquia de Parrillas. Es obra de Pedro Luna y Luis Salcedo con una marcada influencia barroco-rococó.

Esta antigua iglesia también cuenta con decoración cerámica en su presbiterio, donde se conservan paneles de azulejos del siglo XVI con motivos de los cuatro evangelistas y otros paneles decorativos de motivos vegetales y de ferrería.

La iglesia fue desacralizada en el año 1981, y tras 34 años de inactividad, reabrió sus puertas en 2015 tras una larga restauración como Centro Cultural El Salvador, dependiente del Ayuntamiento.