Iglesia de Santo Domingo de Millana

La iglesia de Sto. Domingo fue levantada a principios del siglo XVI sobre otra románica, situada a las afueras de Millana.

El tempo tiene planta de cruz latina, de una sola nave dividida en cuatro tramos, con cabecera recta, crucero que sobresale en planta y bóvedas de cañón con lunetos.

En el interior, tanto el arco triunfal como los que dan paso a los brazos del crucero y capilla mayor, son de medio punto dovelados. El crucero se cubre con cúpula sobre pechinas. El coro se halla en alto a los pies del templo.

La sacristía tiene planta cuadrangular, de pequeñas dimensiones y se encuentra adosada a la cabecera de la iglesia.

En el exterior la obra es de mampostería reforzada con sillería en la portada, torre y bajos del edificio. La cubierta es a dos aguas.

Sobresale la portada principal, de estilo románico con influencias cistercienses; consta de seis arquivoltas que descansan sobre columnas de altas basas. Los ábacos, moldurados con bocel y filete, recorren a modo de imposta la totalidad del lienzo y sus ocho capiteles ofrecen un repertorio alegórico de las fuerzas del mal que hostigan al hombre en formas de seres del bestiario, grifos, orejas pequeñas y barbas de chivo, sirenas-pájaro…etc.

Encima de la puerta anterior aparece una cornisa que descansa sobre canecillos y metopas, decoradas con cabezas de animales y hombres de enorme tosquedad, rosáceas, flores, hojas y entrelazados geométricos. Estos motivos decorativos están sacados sin duda del monasterio de Santo Domingo de Silos en Burgos.

La torre es de planta cuadrada, de tres cuerpos, con una línea de impostas dividiendo el segundo y tercer cuerpo, con campanario con cuatro vanos y arcos de medio punto, uno en cada lado del cuadrado y rematado por una balaustrada ciega y lisa con bolas. Está adosada al extremo suroeste de la construcción.