Hospital de San Juan Bautista (Hospital de Tavera)

Con la idea de unificar todos los hospitales toledanos y convertir su fundación en un hospital general, el Cardenal Juan Pardo Tavera (1472-1545) decidió levantar un gran hospital extramuros de la ciudad, bajo la advocación de San Juan Bautista.

En septiembre de 1541 dieron comienzo las obras de explanación y cimentación del edificio, siguiendo las directrices de Alonso de Covarrubias, responsable de un proyecto influido por ejemplos italianos. A finales de 1550 le sustituyó Hernán González de Lara, dándose por concluidas las obras con la bendición de la capilla en 1624 y la colocación del sepulcro del cardenal al año siguiente. Las obras duraron unos 84 años.

El patio del hospital y su fachada sur fueron los primeros en construirse. El primero está formado por dos espacios gemelos rectangulares, unidos por una galería central, constando de dos plantas tratadas de la misma manera. Los dos pisos tienen la misma altura: el bajo, dórico-toscano, con arcos de medio punto, y el superior, jónico, con arcos escarzanos (rebajados). La decoración tiene la clara impronta de Alonso de Covarrubias: el orden dórico con su entablamento de metopas y triglifos tiene las enjutas decoradas con unos espejos negros que, en el orden superior, han sido sustituidos por unas rosetas. La citada galería comunica el zaguán con la iglesia componiendo la columna vertebral del patio, uno de los más hermosos del renacimiento español. 

La fachada principal, que se ofrece a la ciudad de Toledo, consta de tres alturas. El piso inferior se encuentra decorado con sillares de granito y ventanas arquitrabadas con dovelas almohadilladas colocadas a soga y tizón; el piso intermedio posee la misma disposición pero con ventanas con arcos de medio punto, con dovelas muy gruesas y de tamaño desigual; el tercer nivel es un espacio retranqueado con respecto a la línea de fachada, con paredes lisas, excepto en las ventanas que también están recercadas con almohadillados.

Detrás de los dos patios, hacia el norte, quedaba un extenso solar que ocuparían el patio de cocinas y la iglesia. La iglesia comenzó a construirse en 1560, después de los patios y la fachada principal, y en ella intervinieron los arquitectos Vergara y Monegro. Tiene una sola nave que se cierra con bóveda de cañón con lunetos, ábside semicircular y crucero plano poco profundo. El crucero está cubierto con una cúpula de media naranja sobre pechinas con tambor y una linterna como coronación. Toda la iglesia está recorrida por pilastras dóricas que soportan un entablamento corrido. En el exterior, el ábside semicircular con pilastras dóricas destaca por su forma y volumen del edificio. Un gran cimborrio octogonal recubre la media naranja interior, y en sus cuatro lados se alzan cuatro pirámides muy alargadas que hacen que la parte superior de la iglesia se eleve en gran manera por encima del edificio del hospital. La sacristía se encuentra adosada a la iglesia en el lado este.

El hospital actualmente acoge a la sede de la Fundación Duque de Lerma, un museo, la Sección Nobleza del Archivo Histórico Nacional, el Archivo de la Casa Medinacelli y en la parte posterior, un centro de enseñanza concertado dependiente de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl.