Festividad del Corpus Christi de Elche de la Sierra
El día del Corpus puede considerarse como uno de los más solemnes y grandiosos de cuantos festejos se celebran en Castilla-La Mancha. El Corpus es la fiesta barroca más representativa de Castilla-La Mancha formando parte de la cultura.
La celebración se lleva a cabo el jueves posterior a la solemnidad de la Santísima Trinidad, que a su vez tiene lugar el domingo siguiente a Pentecostés (es decir, el Corpus Christi se celebra 60 días después del Domingo de Resurrección). Específicamente, el Corpus Christi es el jueves que sigue al noveno domingo después de la primera luna llena de primavera del hemisferio norte. Esta fiesta surgió en la Edad Media siendo instituida como fiesta litúrgica el 8 de septiembre de 1264 por el papa Urbano IV.
Si bien el arte efímero con motivo de las fiestas del Corpus cobra un gran protagonismo en la práctica totalidad de las poblaciones, en Elche de la Sierra la manifestación ornamental se traduce en la elaboración de unas alfombras de serrín que cubrirán las calles por las que transcurrirá el cortejo procesional. Esta fiesta representa un ejemplo de cómo el patrimonio cultural inmaterial es un patrimonio vivo sujeto a continuos procesos de transformación.
Esta costumbre data del año 1964. Su origen se lo debemos a Francisco Carcelén, quien se había quedado maravillado un año antes al contemplar una alfombra con pétalos de flores en la festividad de la Octava del Señor en el barrio de Can Palet en Tarrasa. Francisco piensa que puede hacer algo de una vistosidad parecida, con viruta tintada aprovechando los excedentes existentes por el gran número de serrerías que había en la localidad. Dicha innovación penetró de tal forma entre la población que desde entonces no sólo han continuado elaborándose, sino que han dado origen a una tradición cultural de primer orden.
Esta manifestación de arte efímero ha conseguido tal importancia en esta población, que todos la consideran como algo tradicional. Su recorrido se ha mantenido casi inalterable hasta nuestros días, estando incluidas las tres plazas de la localidad desde el año 1964, y el mismo recorrido desde 1976.
El proceso de elaboración de una alfombra es lento y laborioso, dura entre dos y tres meses. En primer lugar, hay que diseñar los bocetos que cambian cada año. Los temas suelen ser religiosos, florales o de motivos abstractos y geométricos. Desde el año 1994 los tramos de calle se eligen en riguroso orden, según la clasificación obtenida por cada peña en el año anterior.
A continuación, es necesario teñir las virutas de madera y el serrín con las que se rellenarán cada uno de los motivos, con una capa muy fina. Pero hay que tener en cuenta que la utilización de distintas técnicas siempre está supeditada a la finalización en un tiempo récord, pues solamente se cuenta con la madrugada del sábado al domingo del Corpus. Actualmente ya se cuentan veintisiete tramos de calle y tres plazas. Estos elementos efímeros solamente se pueden contemplar durante unas tres horas, antes de que se inicie la procesión, pues una vez que comienza y al paso de la custodia todo desaparece. El número de peñas alfombristas implicadas ha ido en aumento y actualmente más de seiscientas personas están implicadas directamente en su elaboración.
Festividad del Corpus Christi de Elche de la Sierra
Festividad del Corpus Christi de Elche de la Sierra