Colegio de San Prudencio de Talavera de la Reina

El Bien de Interés Cultural denominado "Colegio de San Prudencio" ocupa una manzana en el centro del Conjunto Histórico de Talavera de la Reina, compuesto por tres edificios que dan a la Plza. del arzobispo D. Pedro Tenorio, c/ Gabriel Alonso de Herrera, c/ Río Tajo, Travesía de San Jerónimo y Plza. de San Jerónimo:

1) El colegio de San Prudencio (antiguo asilo del mismo nombre) es un edificio rectangular de estilo mudéjar del siglo XV, de tres alturas y dos fachadas que dan, la occidental a la c/ de Gabriel Alonso de Herrera y la oriental a un patio interior que se forma con el patio de la iglesia.

La puerta principal es de estilo renacentista compuesta de un arco de medio punto, flanqueada por dos columnas jónicas sosteniendo un entablamento con un pequeño friso liso con la inscripción "Asilo de San Prudencio". En la parte superior de esta puerta aparece un templete clásico de piedra en cuyo interior se encuentra la imagen del santo titular, realizado en cerámica talaverana.

El resto de la fachada donde se inscribe la puerta anterior está formada por un zócalo de piedra en la parte baja y en la parte superior, un muro formado por cajas de mampuesto y ladrillo donde se abren ventanas dispuestas simétricamente.

Interiormente las habitaciones y salas se disponen en torno a una galería en el piso bajo y un pasillo en el primer piso. La galería está formada por arcos con ventanas y zócalos con azulejos realizados por Ruiz de Luna de principios de siglo XX.

Actualmente el inmueble lo ocupa el Centro Regional de Innovación Digital (CRID).

2) El convento de los frailes de San Jerónimo, situado en la Plza. del arzobispo D. Pedro Tenorio, fue fundado en 1397 por dicho religioso con el nombre de Convento de Santa Catalina.

Durante el siglo XIX el edificio paso por distintas manos y tuvo distintas funciones (cuartel, casa de vecindad, fábrica de sedas, almacén…etc.) hasta que en 1882 se instalaron en él los jesuitas. Después, a inicios del siglo XX, lo ocupó otra comunidad religiosa, la de los padres agustinos, para finalmente pasar a manos de la fundación educativa de San Prudencio, al que actualmente pertenece.

Fruto de su historia el edificio se encuentra muy transformado. Del tiempo de su fundación quedan escasos restos arquitectónicos como es una portada de piedra, formando parte de la fachada principal, llamada Puerta del Serafín o Querubín, que está compuesta por un arco de medio punto y otro apuntado, enmarcado dentro de un alfiz con molduras, de textura gótica. Hoy en día se accede a través de ella al Patio de los Artesanos (claustro).

El edificio tiene planta cuadrada, con un patio interior (el claustro citado antes), formado por tres órdenes superpuestos de arcos rebajados que hoy se nos presenta como un espacio de un solo piso compuesto por una arcada simple, con arcos de medio punto y revocado de blanco.

3) La iglesia de Santa Catalina o San Jerónimo, situada en la Plza. de San Jerónimo, anexa al convento anterior, comenzó su construcción en 1455 y se inauguró en 1469. Tiene añadidos posteriores que abarcan hasta el siglo XVII.

El templo es de estilo de transición del gótico al renacimiento en sus comienzos con rasgos barrocos en sus últimas fases de construcción. Levantado con fábrica de sillería, tiene una sola nave y el ábside es semicircular. Un doble cuerpo de pilastras conforma el interior del templo de dos alturas: de estilo dórico el inferior y jónico el superior. Una cúpula de media naranja, con pechinas adornadas con bajorrelieves, cubre el crucero. A los lados de la nave se abren, en arcos de medio punto, unas hornacinas que contienen las capillas laterales del templo. Destaca la escalera volada que da acceso al coro, obra del maestro Guerra (1551), así como la sacristía de planta octogonal y el Altar Mayor con un retablo barroco.