Iglesia Parroquial de San Cristóbal de Almorox
La iglesia parroquial de Almorox, levantada bajo la advocación de San Cristobal, es un edificio de transición gótico-renacentista con terminaciones barrocas, construido sobre los restos de otro templo anterior.
El edificio se inició en el año 1509, durante el reinado de los Reyes Católicos y las obras corrieron a cargo del arquitecto Gil de Hontañón que sería sustituido en 1518 por Pedro de Salamanca (natural de Almorox), retomando el primero las obras en 1519 y realizando el cuerpo principal.
La fábrica del templo es de sillería y está jalonado exteriormente por contrafuertes. Consta de una sola nave, dividida en cinco tramos, con cabecera poligonal formada por un ábside con tres lados y coro en alto situado a los pies. Posee bóvedas nervadas cubriendo el interior de la nave, apoyadas en arcos fajones de medio punto y formeros apuntados.
Destaca el retablo del altar, iniciado en el año 1781, dedicado a Nuestra Señora de la Asunción, al que posteriormente se añadió un óvalo con la imagen de San Cristóbal. La parte baja del retablo está construida en mármol y la parte superior en madera.
Además del retablo anterior, el templo posee una serie de valiosos retablos, situados todos ellos en el lado de la epístola, como son (comenzando por la cabecera), el de San José (gótico), el de la Inmaculada Concepción, el de San Roque (atribuido a Correa de Vivar), el de Santa Lucía (atribuido a Berruguete) y el de San Antonio.
A la izquierda de la capilla mayor se sitúa la sacristía, obra de Alonso de Covarrubias con licencia del cardenal Silíceo. Su construcción comenzó alrededor del año 1552 y exteriormente está realizada en piedra de sillería, tiene ventanas a dos niveles y una cúpula de gran proporción y simetría.
Junto a la sacristía, se halla el púlpito de estuco. Data de principios del siglo XVI y pertenece al estilo gótico-mudéjar. Está compuesto por cinco caras, realizadas en labores caladas; la central parece aludir a la parábola del Hijo Pródigo. A la derecha del templo, frente al púlpito de estuco, se localiza el púlpito de hierro forjado, realizado por Pedro Gómez Roche en el año 1738.
Al exterior, la portada principal se abre en la fachada norte y fue realizada entre 1550 y 1560 por Juan Fernández. Es de estilo renacentista, apareciendo cobijada por un arco triunfal de medio punto con una bóveda de crucería. El vano de entrada es arquitrabado, y encuentra flanqueado por dos columnas de fuste estriado sobre pedestales, con capiteles corintios que tienen cabezas de carnero como volutas. La jamba y los dinteles de la puerta poseen una decoración en candelieri y toda la composición finaliza con una gran venera.
Por último, la torre se sitúa a los pies del templo (fachada occidental) y tiene planta cuadrada. Está compuesta de tres cuerpos separados por una fina línea de impostas, con un campanario que tiene abiertos dos vanos con arcos de medio punto por panda. La torre finaliza en una azotea con balaustrada perimetral de piedra y un cuerpo octogonal retranqueado con chapitel cerámico abuhardillado y piramidado que en 1575 Juan Fernández y Antonio Díaz se comprometieron a revestir de azulejos.
Iglesia Parroquial de San Cristóbal de Almorox
Iglesia Parroquial de San Cristóbal de Almorox