Hospital de Santiago Apóstol de Cuenca
El Hospital de Santiago Apóstol fue fundado inmediatamente tras la conquista cristiana, hacia 1182, reformándose en 1511 y proyectándose un nuevo edifico con cuatro grandes lienzos o crujías, dentro de las cuales se encerraba un patio porticado. En el edificio intervinieron posteriormente los arquitectos Francisco de Mora, cuya reforma se vio malograda por la Guerra de Sucesión en 1706, y Martín de la Aldehuela, cuyo proyecto de 1763 culminó Lorenzo de Santa María.
La fachada principal, como sucede con la actual, estaba orientada al este. A la entrada había un patio que daba paso a la Puerta Dorada, que estaba labrada al «romano», y era llamada así por el color con el que estaba policromada. Esta portada plateresca estaba protegida por un voladizo de madera, decorado con casetones y sostenido por dos columnas, y, encima del entablamento, presentaba una hornacina donde se colocó una escultura del Apóstol Santiago. Los escudos de la Orden de Santiago y los de los Reyes también aparecían en la portada.
A través de la puerta anterior, se ingresaba en el zaguán que era una pieza grande, con las paredes enlucidas y el techo de madera. Tenía dos puertas: una conducía a la iglesia y la otra desembocaba en el patio que hoy conocemos.
El patio es cuadrado y tiene dos plantas, ambas con galerías arquitrabadas, con columnas de piedra y zapatas de madera en la baja y pies derechos en la alta, las cuales han sido cerradas posteriormente. Las columnas se alzan sobre plintos y presentan un tipo de capitel con estrías y adornados con escudos con la Cruz de Santiago. La pila o fuente central del patio tiene planta octogonal, concebida a modo de concha, alternando en su ornamentación el escudo de la Orden de Santiago con unas máscaras, por cuya bocas brota el agua. Se remata por una escultura en bronce con la imagen del apóstol Santiago a caballo.
A finales de 1762, se decidió demoler la vieja iglesia y levantar otra nueva dirigida por Lorenzo Santa María con planos de José Martín. Es de estilo barroco y en ella se unifica el espacio mediante el tratamiento curvo y continuo del muro.
En el interior del templo aparecen tribunas y ventanas abiertas en los nervios de la cúpula. Posee una cornisa corrida y en los brazos del crucero dos grandes relieves en estuco con la representación de la Virgen al apóstol Santiago.
El exterior es de gran simplicidad, poseyendo un ábside recorrido con pilastras jónicas, termina con una espadaña que mira a la ciudad.
En el siglo XVIII, se construyó la Puerta del Mediodía, que tiene inscrita la fecha de 1772.
Por último, hay que destacar el acceso al Hospital, resuelto mediante una escalinata de doble ramal que se une en las mesetas, para volver a desplegarse, y que fue realizado a finales del siglo XVII.
Hospital de Santiago Apóstol de Cuenca
Hospital de Santiago Apóstol de Cuenca