El Rey Alfonso XIII visita al conde de Romanones en su finca de Miralcampo. Documento del mes de julio de 2024 en el Archivo Histórico Provincial de Guadalajara.
EL REY ALFONSO XIII VISITA AL CONDE DE ROMANONES EN SU FINCA DE MIRALCAMPO, EN AZUQUECA DE HENARES (GUADALAJARA). 27 de junio de 1916.]
(Fotografía de Francisco de Goñi y Soler).
Signatura AHPGU, AFGU-00005-00534-VD.
Colección Goñi, Fondo Agrupación Fotográfica de Guadalajara.
“El Rey con la familia de Romanones en Miralcampo” <sic>. (Título otorgado por el autor a la fotografía).
Negativo, placa de vidrio, 9 x 12 cms.
Esta fotografía, y las otras dos que acompañan a ésta en la galería de imágenes, forman parte de la Colección Francisco de Goñi y Soler propiedad de la Agrupación Fotográfica de Guadalajara, en depósito en el Archivo Histórico Provincial de Guadalajara y que en esta ocasión nos sirven para rememorar a uno de los personajes más singulares y poliédricos de la vida política española de los siglos XIX y XX. Nos estamos refiriendo a Álvaro de Figueroa y Torres, Conde de Romanones (Madrid, 9 de agosto de 1863-11 de septiembre de 1950).
Abogado y jurista, político liberal, terrateniente, académico de la de Bellas Artes de San Fernando, de la de Ciencias Morales y Políticas, de la de la Historia, presidente del Ateneo de Madrid, de la Sociedad de Amigos de Portugal, del Patronato del Museo del Prado, alcalde de Madrid, diputado, senador, director de periódico, escritor, financiero, empresario, presidente del Gobierno, ministro, presidente del Congreso y del Senado…en fin, como decíamos, una figura absolutamente destacada e influyente en su época, prototipo del político “cortesano”, con pocos escrúpulos y grandes intereses económicos, al que se considera como uno de los más conspicuos representantes del fenómeno del caciquismo en la España de la Restauración.
Más allá de esa influencia y autoridad que ejerció a nivel estatal por todos esos títulos y cargos mencionados, el Conde de Romanones jugó, durante más de cuarenta años, un papel dominante en la vida política de la provincia de Guadalajara, sustentado todo ello en un sistema clientelar y de favores en los que las relaciones económicas y familiares, la distribución de recursos y la manipulación en los procesos electorales tuvieron siempre como único objetivo mantener su poder y la alargada sombra que proyectó sobre esta provincia.
No es objeto de este breve artículo desmenuzar aquí la extensa y azarosa existencia de nuestro personaje. Nos remitimos, para mayor conocimiento de su vida y obra, a la magnífica biografía y diferentes trabajos que sobre el Conde de Romanones ha publicado a lo largo de los años el profesor Javier Moreno Luzón.
Volviendo a nuestro documento del mes, se trata de una fotografía que forma parte de una serie de al menos tres fotos realizadas por Goñi, el martes 27 de junio de 1916, en la visita que el rey Alfonso XIII hizo al Conde de Romanones -presidente del Gobierno en ese momento-, en su finca y palacio de Miralcampo, en Azuqueca de Henares (Guadalajara).
Dicho encuentro tuvo lugar ese día, después de la breve estancia de don Alfonso en Guadalajara para entregar los “Reales despachos” a los nuevos oficiales de la Academia de Ingenieros Militares. De ahí que el rey vista el uniforme del Arma de Ingenieros. A su regreso a Madrid el monarca se detuvo en Azuqueca para saludar al conde y departir con él, según cuenta “El Liberal Arriacense” (periódico controlado también por Romanones) en su crónica del 1 de julio.
El archivo fotográfico de Francisco Goñi fue depositado en el Archivo Histórico Provincial de Guadalajara a través de un comodato firmado entre la entonces Consejería de Cultura y la Agrupación Fotográfica de Guadalajara en marzo de 2007.
Este fondo tiene un gran valor como documento histórico y artístico. Constituye un retrato formidable de la provincia de Guadalajara y en general de España. Se trata de una de las colecciones más representativas y artísticas de la época. Está formado por 863 placas de cristal de 9 x 12 en su mayoría.
Francisco de Goñi y Soler (Madrid, 1873- Guadalajara, 1936) perteneció a una familia de la alta burguesía. Ingresó en la Academia de Artillería de Segovia, aunque pronto abandonó la milicia para dedicarse profesionalmente a la fotografía.
Goñi fue fiel seguidor y amigo de la Familia Real e hizo de su cámara el testigo de honor de los momentos menos protocolarios de la Corte. Viajó con Alfonso XIII por todo el país. Su temática es amplia, ya sea del Rey acompañado de su séquito en cacerías o de tiernos momentos compartidos con sus hijos en los jardines de palacio. Su obra no se circunscribe en exclusiva al ámbito real sino también da testimonio del discurrir cotidiano de la época y sus costumbres.
Además de retratar la vida protocolaria y ociosa del Rey, sus reportajes cubrieron otros géneros de la época: desde los toros y el deporte hasta la información política y crónica social de sucesos.
BIBLIOGRAFÍA
Moreno Luzón, Javier (1998): Romanones: caciquismo y política liberal.
https://dbe.rah.es/biografias/14549/alvaro-de-figueroa-y-torres
Riánsares Serrano Morales
Directora del Archivo Histórico Provincial de Guadalajara
Rafael de Lucas Vegas
Archivero AHP Guadalajara