Se construyó entre 1907 y 1910 para albergar la nueva máquina de extracción eléctrica que sustituyó a otra de vapor de 1874.

El edificio industrial es de planta rectangular, única planta de doble altura, diáfana con muros de carga de ladrillo visto, con zócalo del mismo material y pilastras en las cuatro esquinas.

La fachada principal tiene tres huecos con arcos de medio punto, con hueco central principal de mayor altura marcando el eje de la nave, en un principio fue un espacio construido abierto y posteriormente se ha cerrado con ventanas de carpintería de madera y cristal sencillo. Este alzado está rematado por un frontón escalonado con tres partes diferenciadas con huecos rematados en arco de medio punto, tres en la parte central y dos en los laterales. Los alzados laterales son iguales con cuatro huecos por altura, tiene dos alturas de ventanas rematadas con arco rebajado, una cornisa de ladrillo corona estos alzados.

Todos los huecos de fachada se encuentran enmarcados en cercos de ladrillo. El remate es mediante un frontón que tiene un elemento decorativo de morfología vertical.

La cubierta es a dos aguas es de teja plana sobre correas de madera. El uso original fue de maquinaría del pozo San Aquilino que todavía se mantiene.