Pozo San Aquilino | Almadén
Este pozo originariamente se conoció como «La Grúa» en el siglo XVI, ya en la época de los Függer, en una visita realizada a las minas en 1609 por el administrador Real se cita el pozo de «La Grúa» como el más antiguo y con un ancho de 17 varas. Tras el incendio de 1755 en la mina del Castillo se utilizó para tratar de recuperar la explotación antigua de la llamada Rama Sur.
A mediados del siglo XVIII este pozo era uno de los tres pozos que ponían en comunicación con el exterior los tres criaderos conocidos como San Diego y San Pantaleón, San Francisco y San Nicolás.
El pozo situado en el cerco de San Teodoro, tiene una sección de 2,9 x 2,7 m2 y tras varias reprofundizaciones llegó a los 378 metros (planta 14ª), de profundidad, aunque actualmente y debido a problemas de hundimientos solo alcanza hasta la planta 9ª.
Está excavado en roca frailesca hasta planta 9ª y pizarra negra y en cuarcitas hasta planta 14ª.
Dispone de guionaje de madera. Su sección permitía la doble circulación de jaulas que se desplazaban impulsadas por una máquina de extracción instalada a unos treinta metros.
Desde principios del siglo XX y hasta 1955 sirvió como segundo pozo de extracción de mineral, saliendo el mineral cargado en vagones de hierro. También se utilizaba como acceso de personal, traslado de materiales y salida de ventilación.
Se ha rehabilitado parcialmente.