“La aeronave se elevó majestuosamente, permaneciendo en el aire cerca de dos horas y quedando demostrada su gran estabilidad. El aterrizaje se hizo sin el menor incidente”. (Guadalajara, Flores y Abejas, 24 de febrero de 1929).
“La aeronave se elevó majestuosamente, permaneciendo en el aire cerca de dos horas y quedando demostrada su gran estabilidad. El aterrizaje se hizo sin el menor incidente”. (Guadalajara, Flores y Abejas, 24 de febrero de 1929).