Caballero nº 1
Los Villares, Hoya Gonzalo (Albacete) | 490 a.n.e. | Escultura | Altura: 165 cm; longitud: 143 cm; anchura: 43 cm | CE14661
El jinete, que coronó un monumento funerario escalonado, es presentado como un hombre de gesto benevolente. Está ataviado con faldellín corto que cubre parte de sus muslos, los pies están calzados con altas sandalias; el torso está cruzado por correajes que sujetan las hombreras, y un ancho cinturón rodea la cintura denunciando su pertenencia a una clase aristocrática, dirigente y guerrera. Sin embargo no porta armas, la cabeza está desnuda para dejar ver el peinado con flequillo y tirabuzones que evocan las esculturas griegas arcaicas, como también la sonrisa de sus labios y los pómulos del rostro. El caballo está parado, con la testuz inclinada, ricamente adornada en la frente, en los correajes, en el bocado, y en la manta, contrastando el trabajo de detalle y de la cabeza con el esquematismo del cuerpo. Tallado sobre un bloque de piedra de grano grueso, fue pintada con vivos colores, de los que no queda rastro. Como imagen de un poder denostado a comienzos del siglo IV a.n.e., la escultura fue abatida desfigurando el rostro del caballero, atravesado por una lanza.