Pozos Nuevos de Valdeverdeja
El conjunto formado por ciento diecinueve pozos con sus pilas-lavadero se sitúa en el extrarradio del núcleo urbano de Valdeverdeja, en un pequeño valle al sureste de la población de Valdeverdeja (Toledo).
Su origen se desconoce, si bien se sabe que ya existían en el siglo XVI por las referencias que de este lugar se hace en las “Relaciones” de Felipe II.
Por otro lado, se tiene conocimiento de que el término de “lavaderos” ya es usado también desde ese mismo siglo, y que este concepto va unido a la existencia de agua, bien en pozos, arroyos o ríos, y frecuentemente asociados a pilas. No obstante, muchos de los lavaderos localizados en la zona de Talavera tienen su origen en el siglo XIX, y han sido remodelados y ampliados en las primeras décadas del siglo XX.
Los Pozos Nuevos de Valdeverdeja están conformados por elementos de distinta tipología, diseminados de forma anárquica, susceptibles de ser clasificados en pilas y pozos.
Las pilas, construidas en piedra granítica de distinto granulado, según el elemento, fueron realizadas por canteros de la zona, por encargo generalmente de particulares. Son contenedores de agua donde se realiza el proceso de lavado. La forma más común es el paralelepípedo, con cajeado interior profundo, orificio de salida de agua en un lateral y, en el opuesto, el lavadero, con incisiones talladas en la piedra de forma paralela, presentando a veces lavadero en los dos lados menores. La parte inferior suele tallarse más toscamente. Se apoyan sobre una plataforma formada por piedras irregulares a modo de calzos.
Los pozos son el elemento que suministra el agua a los lavaderos. El material es el mismo que el empleado en aquéllos, siendo las formas más utilizadas la cuadrangular y la circular. La forma cuadrangular es la más común, llevando en algunos casos cubierta abovedada de granito o de chapa metálica. Los pozos circulares son de una sola pieza sin cubierta, o de varias piezas grapadas entre sí.
Gran parte de las pilas y los pozos fueron de propiedad privada, dato que se constata a través de nombres o iniciales que aparecen grabados; también tenían nombre los pozos: Pozo de Don Bernardo, Pozo de la Barrera, Pozo de la Leche, etc.
Se trata de un conjunto etnográfico representativo de una sociedad rural, cuya economía era doméstica, que debe conservarse, como testimonio, para conocimiento de generaciones futuras.
Pozos Nuevos de Valdeverdeja
Pozos Nuevos de Valdeverdeja