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Ermita del Cristo de la Vega

La ermita del Cristo de la Vega es un templo reconstruido en el siglo XIX que conserva un ábside anterior de estilo mudéjar, procedente de la iglesia original. Está situada en plena Vega Baja de Toledo, en la antigua zona de cementerios de la ciudad. También conocida como Basílica de Santa Leocadia, el origen del templo se remonta a la época visigoda, celebrándose en su día en su interior "Los Concilios", asambleas eclesiásticas de obispos que se convocaban de manera regular para legislar o deliberar sobre asuntos religiosos.

La ermita, durante la Guerra de la Independencia (1808), fue prácticamente destruida, quedando en pie únicamente su ábside del siglo XIII, y pese a haber sufrido este último varias reconstrucciones, aún se puede apreciar su disposición original.

La cabecera exterior de la ermita está compuesta por dos elementos, el ábside de forma semicircular y el presbiterio recto que se extiende a continuación. En ellos destaca su belleza, conseguida a través del purismo de sus formas, siendo una de las imágenes más icónicas del llamado estilo mudéjar toledano. Ambos elementos (ábside y presbiterio) están recorridos por cuatro frisos de ladrillos superpuestos que ocupan todo el paño del muro, desde el suelo hasta el tejado, y en los que se alternan distintos órdenes de arquerías ciegas (formados por arcos de herradura, polilobulados, apuntados, de medio punto, etc...). A su vez los frisos quedan separados en altura por una línea de impostas lisas.

El interior del ábside lo componen otros tres frisos corridos ciegos superpuestos y una bóveda de cuarto de esfera en la parte superior. Los frisos están realizados también en ladrillo y cubren el muro desde el suelo hasta el arranque de la bóveda. El friso bajo está compuesto por una sucesión de arcos de herradura apuntados, el friso intermedio lo forman de una sucesión de arcos polilobulados entrelazados y el friso alto repite la solución del primero. Estos frisos a su vez están separados en altura por dos líneas de ladrillos superpuestas, dispuestos, unos en esquinilla y otros en sardinel formando una leve cornisa nacelada.

En 1826, el párroco Vicente Vega inauguró el nuevo edificio, época de la que data su estructura actual. La construcción tiene influencia mudéjar (estilo neomudéjar), dejándose ver la misma en la típica edificación de ladrillo de era, planta de una sola nave y el empleo de distintos arcos de herradura, conservándose también restos de la antigua policromía.

Poco después en 1846, el cabildo de la Catedral añadió una especie de atrio adosado a la fachada occidental de la ermita, formado por dos galerías enfrentadas, abiertas al interior de un patio. Las galerías tienen planta rectangular, se cubren a dos aguas y las arquerías que las componen están formadas por pilares cuadrados de granito y arcos de medio punto ligeramente rebajados. El atrio se cierra en su parte occidental con una trabajada reja de forja. Este espacio ha servido de cementerio para el enterramiento de los canónigos.

Información
  • Provincia y localidad
    • TOLEDO
    • TOLEDO (capital)
  • Categoría
    MONUMENTO
  • Figura de protección
    Bien de Interés Cultural (BIC)
  • Adscripción cultural
    Edad Media - Edad Contemporánea
  • Fecha BOE
    04/06/1931
  • Tipo
    BIEN INMUEBLE
  • Periodo
    S. XIII - S. XIX

Ermita del Cristo de la Vega

Ermita del Cristo de la Vega