Pozo de Arriba, pozos monumentales de El Toboso
Los pozos de El Toboso son construcciones que datan al menos del S. XVI y llegan hasta nuestros días, distribuidos por toda la geografia toboseña, que nacieron ante la necesidad de buscar o almacenar agua en las secas tierras manchegas. Unos buscan el agua en las capas freáticas del subsuelo mientras que otros recogen el agua de lluvia de las escorrentias superficiales.
Se tratan de construcciones populares que presentan como características morfológicas comunes, las siguientes: están cerrados con una fábrica de mampostería de planta circular que eleva mediante uno, dos o tres peldaños el brocal del pozo sobre la rasante de la vía pública en la que se localizan. Los brocales suelen ser muy bajos. No conservan restos de haber tenido un sistema de garrucha para la elevación del agua.
Los pozos comprendidos en la declaración de BIP (DOCM, nº. 214 de fecha 3/11/2016) son: 1) Pozo de la Gascona, 2) Pozo de la Torre, 3) Pozo de la Puerta, 4) Pozo de la Virgen, 5) Pozo de Arriba, 6) Pozo de la Cadena, 7) Pozo de la Hilandera y 8) Pozo Primero o Pozo Dulce.
Pozo de Arriba: Está formado por una gran plataforma circular sobreelevada con respecto al terreno circundante a la que se accede mediante dos escalones que bordean su perímetro. El centro de la plataforma lo ocupan cuatro brocales independientes que permiten el acceso al buzón; éste es de mampostería careada, conservando en su zona superior dos arcos de medio punto cruzados que sirven de sustento a los brocales y a la plataforma exterior. El pozo se localiza en un entorno periurbano, a poco menos de 500 m al sureste del núcleo urbano, en un entorno agrícola, ocupando la zona más alta de un cerro, muy cerca del trazado del Camino Viejo a la Mota del Cuervo.
La superficie exterior del pozo está formada por una plataforma circular realizada con mampuestos regulares de caliza tobácea que queda enmarcada por un anillo perimetral, muy marcado, en cuyo centro se localizan los cuatro brocales independientes; la superficie entre los brocales y el anillo perimetral se rellena con losas de menor tamaño, algunas dispuestas en sentido radial, que se adaptan a los espacios existentes. En los lados sudoriental, sudoccidental y noroccidental del anillo perimetral se localizan tres rebajes de planta más o menos rectangular y escasa profundidad excavados en las losas que interpretamos como bebederos. Bordeando esta plataforma se disponen dos hiladas perimetrales escalonadas, compuestas por mampuestos escuadrados. En el peldaño inferior también se encuentra excavado otro bebedero. La zona exterior está rodeada por un pavimento de guijarros de cuarcita.
Los cuatro brocales son independientes, estando tallados cada uno en un bloque cilíndrico, colocados apoyados directamente sobre la falsa bóveda de mampostería. En sus bocas, siempre en el lado opuesto al centro de la estructura, se conservan las abrasiones producidas por las cuerdas usadas para la extracción del agua. Cada una de las bocas aparece cerrada por una reja de hierro.
El buzón es una estructura cilíndrica de desarrollo troncocónico, construido con muros de mampostería careada formado por piezas de tamaño medio y grandes dispuestas a hueso. En su parte superior se sitúan cuatro mampuestos sobresaliendo del muro, enfrentados dos a dos, que sirven de soporte a los dos arcos cruzados que conforman la base de apoyo de la plataforma. La fábrica del buzón se va cerrando mediante un sistema de falsa bóveda, sobresaliendo los mampuestos de las hiladas superiores hasta generar un cerramiento que apoya también en la cara superior de los arcos, que genera la plataforma superior del pozo y sustenta sus brocales.
Pozo de Arriba, pozos monumentales de El Toboso
Pozo de Arriba, pozos monumentales de El Toboso