Convento de la Inmaculada Concepción de Ciudad Real
El Convento de la Inmaculada Concepción o Monasterio de Concepcionistas de Santa María Beatriz de Silva de Ciudad Real (en honor a la madre fundadora de la Orden de la Inmaculada Concepción) es conocido también por el Convento de las Terreras, por asentarse sobre una antigua laguna del mismo nombre.
Se trata de un edificio construido en el siglo XVI, que combina formas del último periodo del gótico con elementos renacentistas. Fue fundado por D. Luis de Mármol, escribano de la Chancillería de Granada, para albergar a las Beatas de la Orden Tercera de San Francisco. Estuvo habitado hasta 2009, encontrándose actualmente cerrado. En el 2023 ha sido adquirido por el Ayuntamiento de Ciudad Real con la finalidad de dedicarlo a fines turísticos, encontrándose actualmente en restauración.
El conjunto se compone de la iglesia, el convento de clausura y los jardines.
La iglesia se sitúa en el lado oriental de la Plaza de la Inmaculada y posee una orientación NW-SE. Es de planta basilical, de una sola nave, dividida en tres tramos:
a) La cabecera de la iglesia, un cuerpo de base cuadrada; al exterior sobresale de la cumbrera del tejado, cubierto a cuatro aguas con teja curva; en el interior aparece cubierta por una bóveda de ochavo apoyada sobre trompas.
b) Le sigue una nave rectangular con tejado a dos aguas con teja curva. El interior se cubre con un techo plano, realizado en estuco y decorado con molduras de época neoclasica. También se abren, a media altura, unos vanos adintelados que iluminan el interior del templo.
c) El edificio finaliza con un cuerpo rectangular, situado a los pies del mismo, cubierto a cuatro aguas y formado por dos plantas. La parte superior está realizada en ladrillo y se levanta por encima de la nave; está formada por una terraza con las típicas celosías de clausura y con un voladizo que apoya en un alero producido por una serie de canes unidos por pequeños arcos.
Los exteriores de la iglesia están jalonados por contrafuertes de base rectangular y de alta envergadura; los muros se levantan sobre un alto zócalo realizado en sillarejo, seguido de una línea impostada de ladrillos situada a media altura y finaliza el alzado con paramentos que combinan el mampuesto cajeado con el ladrillo en verdugadas y ángulos.
La portada principal de la iglesia da a la plaza y se encuentra abierta en el lado del evangelio del templo; se trata de un vano sencillo con jambas y arco escarzado realizado en ladrillo toledano, abierto en un cuerpo en forma de nártex entre contrafuertes. Sobre el muro, por encima del nártex, aparece la espadaña de época posterior; está formada por ladrillo, dos arcos de medio punto y un remate barroco.
La iglesia en su interior cuenta con un retablo del siglo XX con la imagen de la Inmaculada Concepción.
El convento se sitúa en el lado oriental de la iglesia, adosado a la nave de la epístola. Está cubierto a dos aguas articulándose en torno a un patio central (claustro) de base rectangular y tres naves adosadas en su lateral este, dispuestas a modo de dientes de peine, entre las cuales se disponen una serie de patios. Destaca su Sala Capitular de grandes dimensiones, cubierta por un artesonado y que en su día albergó una talla de la Virgen del siglo XIII-XIV, conocida como la Porterita, hoy expuesta en el Museo Diocesano de Ciudad Real.
Otros dos jardines se sitúan al norte y sur de este edificio.
Convento de la Inmaculada Concepción de Ciudad Real
Convento de la Inmaculada Concepción de Ciudad Real