Iglesia de Santa María del Salvador

La iglesia de Santa María del Salvador de Chinchilla de Montearagón es uno de los pocos templos construidos, en su integridad durante los años finales de la Edad Media, en particular a mediados del siglo XV. Consta de templo, torre y claustro. Es la iglesia principal de la ciudad y cabeza de su arciprestazgo. Es, además, el santuario de la Santísima Virgen de las Nieves, patrona de la ciudad de Chinchilla.

El templo tiene tres naves dividida en cuatro tramos; su cabecera está formada por un ábside poligonal situado en la nave central que funciona como capilla mayor y sendas capillas de testero plano, a ambos lados de aquella, construidas con piedra y cubiertas con bóvedas sencillas.

El tejado se cubre a dos aguas, excepto el cimborrio y la linterna que lo hacen a cuatro aguas.

El cimborrio tiene base cuadrada y forma de torre, apareciendo desproporcionalmente elevado por encima de la cumbrera de las naves; se remata con un tejado cerámico pintado de azul y rojo, típico de estas tierras próximas al levante. En sus muros hay abiertas gigantescas cristaleras en forma de vanos de medio punto, así como dos enormes arbotantes adosados a sus costados.

En el interior, la cubierta del edificio está soportada por pilares cuadrados de piedra, con arcos de medio punto y bóvedas de yeso y ladrillo, excepto en el cuarto tramo desde los pies, que posee bóvedas de crucería gótica.

En cuanto a la ornamentación interior destaca la reja que cierra la capilla mayor. Es de estilo gótico, fechada y firmada en 1503 por Antón de Viveros, que ofrece una rica decoración en el remate de dorados florones de cardinas, y un acceso trebolado de exuberante ornamento. Los púlpitos laterales son platerescos y parecen obra de mediados del siglo XVI.

La portada principal, situada en el lado occidental, es de estilo gótico y data de la 2ª mitad del siglo XV. Es abocinada, constando de cuatro arquivoltas decoradas con cardina y un tímpano liso con esculturas sobrepuestas formadas por un crucifijo con dos grupos escultóricos representando El Calvario y La Piedad. Este último está sostenido por dos arcos carpaneles y un parteluz con la talla de la Virgen con el niño con dosel y peana. En las jambas se representan a San Pedro y San Pablo.

La torre se sitúa al noroeste, siendo de planta cuadrada, de dos cuerpos: el primero es elevado, sólido y macizo, enteramente gótico; y el de las campanas de estilo barroco (siglo XVIII), constando de dos vanos por panda y está coronado por un prominente alero.

El claustro se encuentra al norte y fue construido sobre otro anterior de época medieval y forma trapezoidal, datando del siglo XVI. Cuenta con cuatro tramos desiguales cubiertos con bóvedas de crucería simple, con arcos de medio punto con sencillos nervios que arrancan de torneadas ménsulas y claves adornadas.