La presa romana de Moracantá en Villaminaya inicia su camino para convertirse en Bien de Interés Cultural
El Diario Oficial de Castilla-La Mancha publicará mañana una resolución de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes por la que se inicia el expediente para la declaración de Bien de Interés Cultural con la categoría de monumento de la presa romana de Moracantá, ubicada en el término municipal de la localidad toledana de Villaminaya.
La presa se localiza al norte del término municipal de esta localidad, en el límite con el del municipio vecino de Almonacid, y al este de la Sierra de la Oliva, junto a los cerros de Los Cerrajones y La Coronilla.
Se trata de una estructura hidráulica de época altoimperial romana de abastecimiento y regulación, de planta recta (unos 40 metros de longitud) y sección rectangular (en torno a dos metros de grosor), con una altura conservada de más de dos metros en la vertiente de aguas abajo. Tenía una capacidad para albergar unos 5.600 metros cúbicos de agua que servían para abastecer a las huertas de cereales de la zona.
Desde un punto de vista constructivo se trata de una obra sencilla, pero bien ejecutada, en la que destacan el empleo de abundante mortero de cal de alta calidad y una impecable selección de materiales por tamaños: menores en la hoja de aguas abajo del dique, medianos en la hoja de aguas arriba y de gran tamaño en el acabado de la hoja de aguas arriba. Está construida fundamentalmente con hormigón, 'opus caementicium', combinada con mampuestos, 'opus incertum', en la vertiente de aguas arriba.
El consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor, ha señalado que, según los diferentes estudios, la presa de Moracantá «tiene la particularidad de ubicarse junto al encuentro de dos arroyos y es un buen ejemplo de las construcciones que los romanos realizaron en la zona para embalsar agua de los pequeños ríos y arroyos con el propósito de abastecer a Toledo o de servir para el riego de los terrenos circundantes».
El hallazgo en las últimas campañas de investigación de un enterramiento de época tardoantigua, y el posible uso habitacional del muro asociado a la presa, abre nuevas perspectivas para seguir indagando sobre la misma.
Según explica Pastor, además de su declaración como BIC, desde el Gobierno regional se va a poner en marcha un proyecto para la consolidación y puesta en valor de esta presa, al que se destinará una inversión de más de 54.000 euros con cargo a los fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia asignados a Castilla-La Mancha.
Las actuaciones, ha añadido el consejero, están previstas que comiencen el próximo mes de septiembre y se desarrollen hasta finales de octubre.
La intervención que se pretende realizar está encaminada a la consolidación de las estructuras de la presa y anexas que conforman el yacimiento, poniendo en valor este espacio. A ello ha contribuido recientemente la inclusión de la presa, como un hito, dentro de los Senderos de Toledo de la Diputación Provincial (PR-TO 39).
Está previsto el reacondicionamiento y relleno del terreno circundante, afecto de sondeos arqueológicos, para garantizar la seguridad de la zona y dejando parcialmente visible en este tramo el muro de 'opus incertum', así como la consolidación y estabilización de las estructuras y la puesta en valor y conservación preventiva de la coronación de los muros de 'opus caementicium' y 'opus incertum', así como su entorno más inmediato