Ermita y pasaje de Santa Ana
La Ermita de Santa Ana se encuentra enclavado en el predio el cual, según define e indica la propia denominación, se trata de un terreno poblado de pinos de unos 10.000 mts2.
El inmueble es de estilo barroco, originario del siglo XVIII, de una sola nave con lunetos, siendo sus medidas de 28 mts. de largo por 6 mts. de ancho y el pequeño crucero 13 mts. y 6'50 mts. respectivamente. Posee cúpula en el transepto, con interesante decoración pictórica y el tretamarfos en las enjutas, como asimismo, en la bóveda que cubre el presbiterio. El retablo, de madera, y la imagen de la Santa son modernos.
La sacristía se encuentra situada a la izquierda del presbiterio. El templo recibe luz natural a través de dos ventanas que se abren en el paño derecho, otra en el izquierdo y una en cada crucero.
La portada de ingreso, adintelada, material que abunda en la totalidad del aparejo de la fábrica, muestra profuso e intenso enjalbegamiento. Se halla precedida, protegida o cobijada por una especie de atrio cubierto. Se trata de un edificio de indiscutible interés local, tanto en el contexto histórico-artístico cuanto en el religioso, lo que viene a constituir a su vez, una sentimental y profunda simbiosis, hondamente enraizada en el alma noble de la comarca de Cenizate y a la que presta regular apoyo la singular belleza del enclave.
Ermita y pasaje de Santa Ana
Ermita y pasaje de Santa Ana