Plano de la casa toledana del sedero Vicente Díaz Benito. Documento del mes. Agosto de 2020.
Vicente Díaz Benito era vecino de Toledo y comerciante en sedas. Al tratarse esta de una actividad por entonces muy lucrativa, a su muerte en 1776 dejó una cuantiosa fortuna, y, como también suele ser habitual en estos casos, la administración y adecuado reparto de todos estos bienes generó abundante documentación, refrendada casi siempre por un notario. Es lo que denominamos una “testamentaría”.
La de don Vicente fue gestionada por el notario toledano Mateo Calvo de Castro, quien registró todos los documentos en el protocolo notarial correspondiente. Y, entre todos estos documentos destacan dos magníficos planos de sendas casas que el finado poseía en Toledo y Nambroca. El documento que presentamos corresponde a la casa de la capital toledana.
En realidad, el plano corresponde a una obra de reforma que quedó sin terminar y solo a la planta principal. Mide 34 x 46 cms. y fue realizado por los responsables de la obra: José Sierra y Julián González. Lo señalado en color ocre es la obra nueva, mientras que el color gris (“pardo”, dice el documento) es lo que se mantiene sin alterar que, como se indica, es un edificio auxiliar quizá también propiedad del mismo comerciante.
El elemento principal de la casa es, desde luego, el “patio solado de jaspe”, con dos pozos y un aljibe, al que se abren el resto de habitaciones: cinco salas, dos alcobas, un dormitorio y un zaguán, mas dos escaleras, una de ellas identificada como “principal”. Bajo la sala más grande, marcada con la letra A, se indica que está “la botica de la casa accesoria”, mientras que debajo de la sala B “está el sótano de la accesoria”
Pero no solo estamos ante un plano magníficamente realizado y conservado, sino que además su localización en el callejero actual de la ciudad es muy sencilla para cualquier toledano. En efecto, la casa, incluyendo su accesoria, abre su portón principal a la calle de San Nicolás, mientras que por el norte linda con la “calle que sale a la Sillería” (el cruce entre las dos calles se denomina “esquina de la botica”, y por el sur con la calle Nueva.
Es decir, se trata del lugar que hoy ocupa la Delegación de Economía y Hacienda, y que hasta hace pocos años ocupó la sucursal del Banco de España, en pleno centro histórico de la ciudad. La casa de don Benito tenía dos vecinos por el este: hacia el norte, la casa del mayorazgo de doña Isabel de Fuentes, y hacia el sur la casa de Tomás Díaz Benito, hermano del finado.
